Mi niña, felicitaciones, vas a tener una hermanita o hermanito, no importa, lo que importa, es que en unos meses, no solo tu formarás parte de nuestro mundo, no por ello vamos a quererte menos, nuestro a amor por ti, será el mismo, vamos a necesitar de tu ayuda en el día a día, en el crecer de tu herman@.
No importa que seáis seres distintos, no creas para nada, que porque él o ella, sea de nuestra misma especie, sangre de nuestra sangre, te vamos a dejar o querer menos, tu papa y yo te damos nuestra palabra que eso no va ocurrir, es cierto, que va a necesitar de nosotros, sobre todo en los primeros años de su vida, pero también va a necesitar de ti, será tu compañer@ de juegos y vivencias, confiara en ti plenamente, nosotros sabemos que a pesar de los celos, la protegerás siempre.
Sé que para mucha gente solo eres un perro, un ser inferior, que para nada es comparable con un hijo, para nosotros no es así… Desde el primer día, teníamos muy claro, que eras nuestra hijita, lo seguimos y seguiremos pensando siempre, tendremos dos hijitos, un hij@ biológico y perruno que fue adoptado.
Recuerdo cuando llegaste a casa, tu padre y yo estábamos tan ilusionados, los nervios nos superaban, como si estuviéramos de parto… Alguien que consideran a los perros, como simples mascotas, no puede entenderlo, pero sé que hay muchas personas, cada vez más, que entienden a lo que me refiero.
Soy consciente, que al igual que nosotros te amamos como una hija, tu nos amas, como a lo que somos, tus papis, sufres como la que más cuando discutimos, haces las mil y una, para que nos reconciliemos, y eres la más feliz, cuando salimos los tres juntos, en pocos meses seremos cuatro, un@ más, pero la diversión será igual o más, pero sobretodo el amor y el cariño será igual o más. Y la familia Muñiz, Ruiz, no podría ser más feliz.
Escrito: 03 de noviembre del 2014
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