Relato: Cicatriz

 

Todo era perfecto, bueno, jamás conocí a mis padres biológicos, pero tengo unos padres que me aman, aunque siempre queda esa espinita, pero no importa, mis padres me amaban, me inculcaron amar a Dios, cada domingo, le adorábamos en la iglesia, “Era nuestro salvador” El creador del mundo, el dueño de nuestras vidas… no solo en la iglesia, sino en todo lugar, cada día, todo está en su tiempo, no, en el nuestro. Yo creía bien eso, estaba confiada, que él me envió a mis papás, por eso y mucho más, siempre le agradecía desde bien pequeñita, me gusta el atletismo, en eso me enfocado. Era buena estudiante, buena deportista, tenía muy buenas amigas, donde hacíamos excursiones espectaculares, un novio encantador,  todo era perfecto, el no conocer a mis padres biológicos, eso solo era una pequeña mopa.

Pero aquella noche, tan lejos de casa, ya oscuro estaba, sola con él, ese príncipe, que no me quiso decir, el porque no me llevaba a casa, el porqué me llevo a ese descampado, donde me empezó arrebatar mi falda, “no, es no” siempre me han habían inculcado, yo no estaba preparada para ese acto, grite varias veces “¡¡¡No!!!” pero el solo me amordazo entre risas y carcajadas con sus manos, ató mis muñecas, y abrió mis piernas y no con delicadeza, penetrándome asta las entrañas con fuerza…

Ya en mi hogar, en mi cuarto, frente al espejo, toda amoratada, la cara, llena de lagrimas, ¡¡Dios!! Me daba asco verme, mirarme tan solo, la rabia, me invadía… ¡¡Dios, ¿Por qué a mí?!! Cogí el vaso, lo estampé contra el espejo de pared, este se hizo a mil pedacitos “Mucho perdí, mucho fracasé, imposible levantarme de esta caída, se acaba mi vida, que no sanaré, mucho sufriré, los errores y las cicatrices son para siempre, que nadie me amará después de aquí”

Aquello solo fue el principio de mi caída, solo podía llorar, nada calmaba este dolor que me ardía por dentro, solo lloraba, lloraba bajo la ducha, ya apenas salía de casa, ya no iba a clase, ya no salía con las con las amigas, ya no hacía deporte, ya no hacía atletismo…

Solo había una cosa, que ya no me daba dolor, me hacía olvidar… un trago, un vaso, una botella de whisky o dos, ya después algo más fuerte, una esnifada, un gramo, dos, ya después, último escalón los pinchazos, los pinchazos de la droga, dormía, ni me enteraba de las horas, de los días… jamás pensé graduarme de tal cosa… pero lo hice a la primera

 

En un motel, tabaco, drogas, whisky del barato, me asomé un espejo, el último que me iba asomar, en toda mi vida, lo tenía todo planeado, la cuchilla bien afilada a mi lado, iba a ser mi único testigo, mi único cómplice, un pequeño corte, la sangre empezaba a gotear, corté más profundamente, apenas lo noté, normal, con lo zombi que estaba miré al espejo, mi reflejo, me sonrió ¡No podía ser! Debía ser corto de mi cerebro drogado Oh… Lo volvió hacer… ahora además me guiño un ojo, miré mis muñecas, no había corte, no había herida… ¡¡nada!! Ahí si me asusté, Sali corriendo, corrí, corrí, para mi asombro, no estaba para nada agotada, ni siquiera cansada, aquello parecía brujería, o quizás lo que yo ya sabía, lo que siempre me inculcaron… “Pero su mano me recuerda que cada herida que pasé todo eso me hizo más fuerte, pero mi cara en el espejo es confirmación de que sigo aquí y no es por suerte.  Cicatriz que miro, pero ya no duele, cicatriz lograste quedarte en mi piel Y me recuerda que ayer sufrí, que ayer lloré, cicatriz que miro pero ya no duele, Te quiero agradecer Porque me hiciste más fuerte, más fuerte que ayer, cada cicatriz, nos recuerda que en él tenemos el refugio y siempre nos sostiene, hoy nada nos detiene, nos llena de fe seguimos de pie Hoy podemos ver Las heridas del pasado nos hacen crecer Ahora somos más fuertes” Así fui consciente, que había llegado abajo, y más abajo, en verdad, seguía en píe, gracias a él, siempre ha estado a mi lado, guardándome, protegiéndome, cuidándome.

 

Poco a poco, volví a estudiar, a salir con las amigas, a reír, a seguir con el atletismo… a vivir “Y sigo aquí, mucho más fuerte”

Escrito: 31 de abril del 2023

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Síndrome de Down. Reflexión personal 2023

 

Hace diez años más o menos por estas fechas, sí días cercanos al 21 de Marzo, el día internacional del síndrome de Down, escribí unas líneas, dando mi opinión entre reflexiones y relatos, uno de ellos era "Por que ya no veo niños con Sindrome de Down"

Sigo muy de acuerdo con esas palabras, es que la tecnología, el saber desde tempranas semanas de gestación, el saber, si vienen con esa condición, si es afirmativo, la facilidad que te dan para que mates al feto, y los estereotipos, mitos, no ayuda en absoluto, para que bebés, niños, niñas, chicos, chicas, mujeres, hombres nazcan, la oportunidad de vivir con Síndrome de Down.

 

Una década ha pasado, aun la falta de información abunda, a la misma los estereotipos, y mitos, esos siguen ahí. Yo realmente no veo niños, o jóvenes con síndrome de Down, yo vivo en un pueblo, si que he visto, un único niño, los hombres y mujeres mas o menos de mi edad, si que he visto, pero no de esta generación.

 

¿Que significa tener síndrome de Down? llevar un cromosoma de más, eso puede llevar a cierto retraso, pero si se trabaja desde temprana edad, puede llegar a ser de lo más independiente… Ahí está el caso de “Pablo Pineda” si él lo logró otros pueden igual, ahí un hombre de mi edad en mi pueblo con Síndrome de Down, y es de lo más independiente, entre otras cosas toca la guitarra, incluso se ha casado, él ayuda a cuidar a su madre con Alzheimer. Hoy por hoy la esperanza de vida del cromossoma21 es de 56 años, eso puede ser también por el envejecimiento prematuro que tienen, pero esa no es razón, para no dejarle nacer, no dejarle vivir.

Hombre o mujer con Síndrome de Down, no son una condición, no son un estereotipo, no son ángeles, ellos también se equivocan, no son niños eternos, crecen, se vuelven hombres y mujeres, con las necesidades de ese tiempo, son personas con sentimientos, emociones, pueden tener su día malo, como tu y como yo, son personas con ganas de aprender, con muchas cosas que enseñarnos, sabrán cosas que tu no sabes, a la misma, querrán aprender de ti, al igual que el resto del mundo, unos y los otros.

La persona con síndrome de Down, sigue existiendo, seguirá haciéndolo, todo depende con que ojo lo mira la sociedad (incluida o sobretodo la familia) si lo trata como una persona más, mirando más la capacidad que ese cromosoma de más, o todo lo contrario…

Como todas las discapacidades, todo dependerá si lo tratan como persona o discapacidad, sobre todo con tanta tecnología, si le dan la oportunidad de nacer.

Escrito: 24 de marzo del 2023

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Relato: Se acabó...

 

Que sencillo es, trabajar, trabajar duro, formar un papel, como un actor, tu primera casa, la empresa, después, de ver a tu hijo como media hora, lo justo para darle los buenos días, y cuatro risas, yo ya hago mi parte, les doy mi talonario cada mes, el sacrificio es estar en la oficina… pero no sé, desde hace un tiempo, todo es más fácil, más llevadero, sí, desde que Clara llegó, no sé, hay algo mágico en ella, es como estar en una nube, contra más tiempo en la oficina, más agusto me siento.

 

Clara y yo, hacemos buen equipo en los proyectos, tenemos mucha afinidad, tenemos unos gustos semblantes y un carácter igual. Al acabar lo mandado, ahora sí, a celebrar con champany, si ella supiera que tengo familia... pero eso sí, no puede ocurrir, no se puede enterar ya que me saco el anillo, para vivir, mi otra realidad. No puedo controlar lo que siento, lo que sí puedo decir que es verdadero, el sueño de cualquier caballero.

 

Llego a casa, solo encuentro una mujer agotada, aun así, intenta encontrar, o más bien encender mi cuerpo, yo me hago el dormido, no puedo explicarlo, es lo que siento, al menos esta noche no me apetece, también tengo derecho a ello, tengo partido en dos mi corazón, cada vez, gana más terreno el nuevo conquistador… Ya discutimos más, reímos menos…

 

Eso es lo que pasó en esa mañana, tuvimos una fuerte discusión, ya ni recuerdo el porqué, pero fue de las más potentes. Me marche  de un portazo, sin ser consciente, que mi casa, mi hogar, se iba agrietando. Conducí hacia la oficina “hay amor, prefiero verte desde mi retrovisor” no pude evitar pensar. Mi oficina,  donde me esperaba aquella princesa, que solo era paz y felicidad, adrenalina todo lo contrario a lo llamado mi hogar… todo era ya monótono e igual.  Genial, otro proyecto, esa noche terminaría tarde, avisaría a mi mujer, la misma que parió a mi hijo de tan solo 7 años, que no me esperara despierta. Mi otra mitad, hicimos un descanso para cenar, comida rápida llegada a la oficina… una botella de vino… charlas, risas, coquetos, al principio inocentes, pero poco a poco, pasados de la ilegalidad… nuestros rostros cada vez más cerca, estaba hermosa, su olor, me deslumbraba, su mirada me enamoraba… estaba jugando con fuego, pero jamás pensé poderme quemar… yo controlaba, es lo único que pensaba… me seguí enredando más, las mentiras solo el principio… ignoraba las grietas de mi casa, las chispas que se encendían, mi mujer esperando tras preparar una noche romántica, hacer las paces, ignorando mi infidelidad, velas encendidas caídas provocando el gran fuego que arrasaba todo lo que encontraba, aunque ese fuego inició mucho antes que esas llamas... Ella aterrada, cogiendo en brazos a nuestro niño, saliendo de la casa, subiendo al coche, dándole velocidad. Intentando localizarme marcando sin parar. Pero ¡¡oh no!! Yo traicionándola más…

 

Primera botella de champany acabada, al son que su camisa arrancaba, marcando esos pechos. Ignoré, ignoré por completo cuando mi mujer, entro en la oficina, aun más en mi despacho, con mi hijo en brazos, sus ojos fueron testigos, como traicioné a su madre. Su madre, lo protegió lo abrazó con fuerza. Sus ojos se llenaron de agua, me miraban fijamente. De la nada, aparecieron un montón de gentes, mirándome, juzgándome, yo me quedé petrificado, totalmente bloqueado,  mi amante, llorando, descubriendo lo asqueroso que era, echó a correr de allí… lejos de mi, ya si, la había perdido para siempre. Mi mujer, sin soltar a nuestro hijo seguía petrificada, ni pestañeaba… Cuando fui acariciarla, pedir clemencia… como cenizas, de ese fuego literal, y sentimental, ella y mi hijo desaparecieron. De tenerlo todo a nada...

 

" “hay amor, se acabó, prefiero verte desde mi retrovisor”Se acabó, celebremos el recuerdo que quedó, no se quién tiene la culpa, ni de quien fue la idea, amar a dos no resulta, por mi sabroso que se vea… ....Me fallo la ecuación amar a dos, rompe a tres…  el corazón"

Inspirada en la canción "Se acabó" de San Luis y Chino y Nacho

Escrito: 14 de marzo del 2023.

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Diario personal: Viajando sola a Gerona capital

 

Hacía mucho que no escribía un diario personal, si no fueras por las cartas a mi hija, no hace tanto que viaje, fue algo innovador también. Transporte adaptado, con mi hija de 3 años, y el padre de ella, a playa de aro, un pueblo cercano, pero fue una salida, dirigida por mi, yo con la independencia, de mi silla de motor, mientras que mi ex, estaba mas pendiente de nuestra niña, y ella feliz de estar de paseo con sus dos papis.

 

No es la primera vez que viajo de mi pueblo costero, a la capital en autobús, pero si, que lo hago sola, sin mas acompañante que mi fiel compañera silla de motor y yo misma, creo que es digno de expresar…. Ya con tiempo encargue el autocar con plataforma, el día antes llamé para confirmar, me confirmaron, ya así me quede “tranquila” Sí, tranquila ente “” ya que me sentía ansiosa, nerviosa, por este viaje, por esta iniciativa, después de tanto tiempo, desde antes de caer en el infierno de las drogas, me sentía orgullosa y ansiosa a la vez. La verdad, debía ir a una reunión de empresa… pero pasaría la tarde turisteando Girona… ya se me ocurrió este plan, todo estaba bien atado, no tenía que fallar nada. Pero con todo era algo nuevo, todo lo nuevo asusta.

 

Pues llegué a la hora indicada, con la sorpresa, que el autobús, llegó sin plataforma, ahí me di cuenta, que poca seriedad y que poco nos tienen en cuenta, los que estamos en condición de discapacidad en mi caso, motriz que necesitamos de la plataforma. La verdad la chica de la agencia, movió cielo y tierra, para que yo pudiera cumplir en mis quehaceres, al final me fui en un taxi adaptado (qué llegó de otro pueblo anulando sus cometidos) pero con todo pagado, “no puedo ir, estoy llevando a un minusválido, a Girona” “Minusválido” ¿Aun existe ese termino? ¿aun nos ven inferiores a los demás? Me chocó mucho… el colectivo de la discapacidad, aún tiene mucho trabajo por delante, para mostrar sus derechos a la misma sus obligaciones.

 

Llegada a Girona capital, me dejan enfrente de la ONCE, cumplí con mis obligaciones, después ya estaba libre. Yo sola y toda una tarde por delante en la capital donde vivo… Y mi pésima capacidad de orientación. Antes de salir, ya fui al baño adaptado de la ONCE, bueno empezaría, buscando donde comer, solo tuve que cruzar un paso de cebra, allí había un bar, lo que me había ahorrado del viaje de ida, me lo gastaría en un menú, sí la verdad comí muy bien, el personal, muy educado, eran dos chicas, incluso una me dijo “si necesitas ir al baño te ayudo sin problemas” no me fue necesario aunque se agradece el detalle.

 

Inicié a turistear, pero como yo de orientación poca, decidí seguir una línea recta, aunque no se en que punto me desvié, con la certeza, que encontraría el punto de retorno. Fotografiando, filmando, todo aquello que me parecía interesante, es que cada paso que daba ya era digno de destacar, estaba haciendo algo nuevo, aun podía haber novedad en mi vida, sin depender de nadie, solo de mi capacidad, que después de volver del inframundo, volvía a ser una aliada, incluso mayor que antes…. Aunque también mi autoestima aumentado, eso es un gran punto a favor. Hubo un par de veces, que me asusté me sentía perdida, pero respire en profundidad, pedí orientación, y logre llegar a mi destino. A la estación de Girona. Ahí con calma, mire las tiendas, acabe en la cafetería donde seguí la lectura de mi libro, y me tomé un café. Lo más destacable es que fui al baño de allí, la estación, adaptado, pero no accesible, las barras, estaban muy separadas, el agujero del váter, muy ancho, sin oportunidad de hacerlo menor, lo intenté casi me veo en el suelo, el baño adaptado, estaba junto con los hombres y mujeres sin discapacidad, ósea había gente si o si, empecé a gritar, pero nadie me escuchaba… con todas lo logré, sentarme en mi silla y salir de allí sin percances, pero heche en falta la campana, por si hay percances. Otro aspecto a puntualizar, en esa salida. Ya el regreso ya fue como esperaba, con el bus adaptado.

 

Bien ahí voy, mi condición no me define, aun tengo mucho que exprimirme, no importa lo que diga la sociedad yo soy tan válida y capaz como cualquiera.

Escrito: 10 de marzo del 2023

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08 de marzo: Pensamientos de una mujer en silla de ruedas.

 

08 de marzo del 2023. Sigo trabajando. Sigo siendo mujer. Mujer con una discapacidad motriz. Pero si veo una diferencia, no del año pasado quizás, pero sí de una década atrás, me pongo a pensar, a reflexionar…. Esa niña, esa joven de ayer, encerrada entre 4 paredes, atemorizada en su punto de venta, por cada acosador que se le acercaba…  sin imaginar, todo lo que le esperaba jamás podía imaginar, todo lo que iba a pasar “lo mejor está por venir…”  cierto, pero… También lo peor… ha sido un torbellino de tantas cosas… me pongo a reflexionar de mí misma, la Vane de hace dos décadas, se sorprendería de está Vane del presente.

 

Tengo claro que mi caballero andante, llegó para rescatarme, sacarme de esa burbuja, hacerme despertar conocerme, si una parte de mí que dormida estaba, pero existía, con él la vine a conocer… y hoy en este 2023, le tomo la mano, le digo “Estoy aquí para rescatarte” No estoy aquí, para hacerme la heroína de nadie, no me merezco tal, solo quiero resaltar, que mi discapacidad no me define, y tampoco la multitud de mitos que existen, en estas dos décadas, he crecido, he madurado, he viajado al inframundo literalmente, gracias a ello, hoy soy quien soy, sigo acosada, muchos me giran la cara, pero ya no me escondo, ni me atemorizo como ayer, durante mucho tiempo tuve un gran héroe a mi lado, yo sé que ahí sigue, esa niña, mi pequeña gran guerrera, nos une de por vida, pero ahora yo también ayudo, soy su escudo si es necesario, ya no me importa lo que diga la gente, sí he cometido errores, algunos gordos, pero como todo el mundo, en el día de hoy intento mejorar, conocerme mejor a mi misma, trabajar duro, en mi peor versión para ser mejor persona, y ahí voy… me siento orgullosa de cómo va el trayecto… Vaya… que la Vane de hace dos décadas, se desmayaría solo de imaginar, espero que la Vane del futuro, no esté decepcionada de lo que vendrá, que desconozco… solo puedo defenderme a mí misma. La Vane del hoy, y decir, que lo hace, lo mejor que sepa.

 

08 de marzo “Día internacional de la mujer trabajadora” pero como bien digo todos los días son 8 de marzo.

Escrito: 07 de marzo del 2023

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