domingo, 27 de abril de 2025

Relato: La caja del NO olvido

 


Desde bien chiquita, pasaba los veranos en casa de mi abuelo, en esa grandiosa granja, llenos de animalitos, de vegetales y frutas, el rincón del esfuerzo sin depender de los demás. Mi abuelo a las 05.00. a.m. en pie, como si nuestra vecina fuera “Heidi la niña de los alpes” llegaba nuestro Pedro particular, para llevarse a nuestros animales a pastar… Yo me quedaba en casa, haciendo pan o quesos, aprendiendo algún que otro secreto, que solo mi abuelo era el dueño… mi  mamá trabajaba, jamás conocí a mi papá, lo que si vi es una madre, que jamás se rindió ni bajo, por poco su esfuerzo, por eso, muchos veranos me los pasaba completos con el abuelo, donde me enseñaba a distinguir las estrellas, y a practicar ejercicios, donde mantener la ansiedad dormida,  eran mis tiempos de paz, de aprendizaje, de crecimiento personal…


Había un gran abeto, en el centro de la granja… Un día llegué del colegio rebotada para no variar, es que no es fácil haber crecido sin un padre, no por mi, no puedo extrañar lo que no conocí, pero los niños pueden ser muy crueles, demasiado, yo sin poder explicar, me poseía  una rabia, una nostalgia extraña sin saber cómo controlar. Unos de esos días en el que la ira me invadía, el abuelo me cogió de la mano, una pequeña pala, en la mano que le sobraba, yo no entendía nada, me recordó las escenas de crímenes de las películas… “¿Vamos a enterrar un cadáver?” lleguemos a ese gran abeto, que jamás le di la atención que merecía… empezó a desenterrar con la pala “Ai madre…” no pude evitar exaltarme, llevándome las manos a la cabeza… viendo como el abuelo, sacaba una cajita de bajo tierra, llena de polvo, llena de arena, como si de un parto se tratará. La abrió, mi curiosidad me ganó….



“Tu madre, muchos días, llegaba como tu, es que ella creció sin una mamá, bien sabes que la abuela murió en el parto, eran distintos tiempos, no pudieron salvar a ambas, tú creciste, sin un papá, ella sin una mamá, como tú había dias, muchos, que llegaba mal, ella se callaba todo, por mas que yo le preguntaba, ella no me decía nada, como tú, que no me sabes exponer pero para ella este abeto era su confidente, y a él le contaba todo, escribía, sus sentimientos, los enterraba en este abeto, con el paso del tiempo, fue consciente, que no le fue tan mal, echaba una mirada hacía atras, le sorprendía, de lo atormentada que estaba ayer, y la paz que sentía hoy, lo mejor que estaría mañana, pero solo era posible exponiendo lo de hoy, para ser consciente mañana, que el hoy no era tan aterrador.  Es que en muchas ocasiones, los peores monstruos, somos nosotros mismos” Me entrego la caja. “Es hora de pasarte el legado, no conociste a tu padre, pero hay sombra dentro de ti, lleno de ira y rencor, estamos diseñados para amar a nuestros padres, por defecto, la ausencia de ellos duele, si no lo dejamos ir, nos acaba matando… Te he visto escribir, como tu madre, tienes madera para ello, escribe, guarda en esta caja del recuerdo, del NO olvido, te ayudará a crecer sanamente” Me entregó una llave, que solo yo poseía… Antes pues, leí, y releí las cartas de mi madre, después ya… 



Así empecé a expresar, primero tocando la madera de ese abeto mi mejor aliado, mi mayor confidente, transmitiendo en palabras, lo que luego enterraba en letras… días, meses, años, aquellas dificultades, malos momentos de ayer, eran cosa de risa en el hoy, así sucesivamente. De tanto en tanto, tenía que hacer memoria de lo mucho que había superado, de lo mucho que había crecido…




Hoy ya soy una mujer, mamá de una niña, el abuelo ya murió, me dejó como herencia ese terreno, ese abeto que ya es mío, desde antes de los 10 años… Mi hija… me recuerda tanto a mi, a la misma vez a su abuela, el don de la expresión escrita, sigue, en la nueva generación, sigue la tradición, de escribir, expresar, y volver a las raíces… esos malos días, para evitar el monstruo dentro para permitir el crecimiento… todo envuelto en la caja del NO olvido…

Escrito: 25 de abril del 2025

Tambíen te puede interesar: El abrazo a un árbol

Sígueme en mis: Redes Sociales

No hay comentarios:

Publicar un comentario

¿Quién soy yo? Conóceme mejor... 2025

¿Quién soy yo? Conóceme mejor... 2025

  Vanesa Ruiz García Zambombilla (Apodo familia paterna) Nacida en 1987 Vivo en la costa Brava-Cataluña – España. En condición de discapac...