Perdón que llegué sin avisar, perdón por adelantarme, pero no aguanté más, debía llegar ya, sé que me detestas, pero no negaras, que cuando me retraso te preocupas, me suplicas de mi llegada, por eso esta vez, decidí venir antes, yo que sabía que tú ya tenías planes, con aquel que tanto deseas un revolcón en tu cama.
A mí no me importa estar presente, prometo, ser discreta, estar calladita, permitiros vuestra intimidad, no te pongas histérica, que tampoco es para tanto, seguro que a él tampoco le importa, eres tú, que le das demasiada importancia.
Para ti solo es un revolcón, pero él te ama, no le importará que tu tripa esta hinchada, tu cara llena de granos, sé, sé que no le importará darte placer estando tu colega contigo, ósea yo.
No te concentres en lo que me odias en estos momentos, sino en aquellos instantes de desespero al ver que no llego. Estoy aquí, alegrate por ello, tomate un buen ibuprofeno, lánzate a ello, empieza a prepararte, arreglarte, mi presencia, no es excusa para no verte hermosa y bueno, nunca se sabe.
Déjate de preocupaciones, y vive el momento, el chico lo merece, diviértete, que es lo importante, yo tu colega de cada mes, te acompañaré fiel mente, a ti mujer, que lo mereces.
Escrito: 13 de marzo del 2016
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