Parece ayer… pero ya pasaron 5
años que llegó mi pequeña guerrera al mundo, mas 39 semanas de embarazo… ósea
cerca de 6 años, que me llegó está etapa de la maternidad. Una etapa tan
natural para todas las mujeres, excepto las mujeres con discapacidad, ya que la
sociedad, ya se encarga de martillarte con lo contrario, llamarte loca solo por
pensarlo, sin pasarle por la cabeza, que, como mujer, lo llevas en tu
naturaleza.
5 años y 9 meses, que he ido
dando mi experiencia, mi testimonio en el mundo de que sí se puede. En este
escrito, quiero animar a todas aquellas mujeres con discapacidad con deseos de
ser mamá. La discapacidad no es incompatible con la maternidad… ¡¡Sí se puede!!
Sí es posible que, en los
primeros años, se necesite una tercera persona, para que os ayude a ejercer, en
aquello físico, no hay problema, buscar esa persona de confianza, tú puedes
estar ahí presente, tu bebé será testigo de ello. A medida que vaya creciendo,
para tu bebe, tu hij@, tu discapacidad será lo más normal del mundo, más bien
no entenderá porque las demás mamás no tienen.
Cada año he hecho un diario, narrando mi experiencia, en este último año, quiero destacar, la independencia que tenemos mi pequeña gran guerrera y yo, realmente Vicky creció, ya con una mamá con discapacidad, con limitaciones físicas, para ella es de lo más normal, que haya situaciones que mamá no pueda ayudar, realmente es una niña bastante independiente eso lo hace todo bastante fácil. A los ojos del mundo, es imposible que una niña de tres años vaya sola con su madre en silla de ruedas… “Se te bajará de la silla y se echará a correr” ¡¡Pues no!! “¿Si se te escapa como lo vas a hacer?” “¿Si se va a la carretera que? “no deberías ir sola” ¡¡Pues no se escapa, cuando vamos las dos solas es una niña muy obediente, entiende las limitaciones!! ¿Quién son ell@s para decirme si puedo estar sola con mi hija? “ A la playa… ¿Y si va para el agua que?” No se va al agua, estamos alejadas de está, entiende que mamá no puede correr tras ella” Porque lo ha vivido toda su vida, y para ella es lo más normal, más es la sociedad que tienen mucho que aprender de estos niños, De los hij@s de las personas con discapacidad
En este último año, ha habido un
aumento de independencia y estrategia ¿A que me refiero? Ha habido situaciones
complicadas, que no he sabido como afrontar, sin nadie más que mi hija a mi
alrededor… , como llegar a los estantes altos, abrir puertas pesadas, ayudar a
mi hija en ciertas situaciones, que asta en mi forma de ver, se necesita de
esta tercera persona, pero sorprendentemente mi hija, con iniciativa, ha
logrado los objetivos. Con su ayuda, de la silla de motor, hemos abiertos esas
puertas, que en un principio parecían imposible, hemos llegado a los estantes
altos gracias a mi hija, que se puso de pie en mis piernas, llegando a la
altura perfecta para poder alcanzar… para mi sorpresa también, con su
determinación y ayuda pude subirla en los columpios más complicados para una
madre con movilidad reducida…
En este último año, mi hija ha
entendido mejor las barreras físicas ya siente la misma indignación que ve en
su madre, cuando le dificultan o cortan el camino, cuando los coches ocupan las
aceras, cuando bloquean las rampas, cuando los lugares están inaccesibles para
llegar, no puede ir con sus amigos…
Resumiendo ha sido un gran año de
crecimiento personal tanto para mi hija como para mi, en mi opinión lo más dificultoso ya está pasado, pero con
todo siempre he logrado esa independencia con mi hija, que ella misma lo ha
hecho tan fácil, lo complicado es la sociedad, como por ejemplo, llevarlos a
fiestas infantiles que hace el alcalde en el pueblo, los niños poco ven la
dificultad de la silla corretean a toda velocidad, sin ser conscientes que la
silla les puede hacer mucho daño, pero peor son los padres, que ignoran que yo
también tengo que controlar a mi hija, se ponen en medio, sin dejarme pasar,
sin dejarme observar, ignorando que para mí son como gigantes, ya que yo
sentada en la silla, soy un niño más (por la altura) eso solo recalca, la
ignorancia de la sociedad de las personas con discapacidad. Por fortuna, tengo
una gran niña, independiente e inteligente, que lo hace todo más fácil, pero no
solo ella, por lo general los hijos de las personas con discapacidad, así son,
porque es lo normal en su día a día, en su vivir, y lo más natural tener a su
mamá, papá o ambos con discapacidad. Así, que no te digan lo contrario… Ser
mamá o papá con discapacidad… ¡¡Sí se puede!!
Escrito: 24 de septiembre del 2024.
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