Pasado, digno, de una despedida,
al igual que todo ser querido, que ya deja este mundo, le dedicas unas
palabras, una extreñanza, pasado, igual a muerte, cada segundo que pasa, ya
pasan al otro mundo, lo vivo es el presente, abre camino al futuro, a la
esperanza.
Está bien recordarlo, pero no
quedarse estancado en aquello que está muerto, céntrate en el presente, en la
vida, con todo hoy quiero dedicarle a mi pasado, unas palabras de despedida, como
cada muerte en su tumba, ese funeral dedicado.
Gracias, pasado, por todo lo
mostrado, todo lo lamentado, todo lo aprendido, gracias por esas alegrías y
esas lágrimas, esas batallas en la espalda. Pasado, ya ha pasado, hay veces que
te miro con tristeza, añoranza, otras con alegría, alegría, por todo aquello que
conocí, que aprendí, añoranza, aquellos buenos tiempos, que ya pasaron, no volverán
pero agradecida estoy, por todo lo conocido, todas aquellas personas, que tuve
la fortuna, de conocer, a la misma, se estaba abriendo brecha, para conocerme a
mí misma.
Gracias por esas caídas, que eran
parte de mi crecimiento, conocimiento, empiezo a entender, que ya no debo más
de lamentarme, de algo que no es bonito de recordar, pero es importarte, repetirte,
que el pasado está muerto, ya nada ni nadie, puede lastimarte, el presente está
vivo, está aquí contigo.
Gracias pasado, por tanto, tanto
lo bueno, lo malo, lo necesario, para poder ser hoy la mujer que soy… soy estoy
a medio camino, de todo y de nada, soy parte de ti, nunca te olvidare, pero te tengo
que enterrar para dar fruto al presente, el florecer del futuro.
Ya, encuentra la paz, yo ya no te
voy a lamentar, descansa en paz, mírame desde un rincón, se consciente, de mi
presente, de ese día a día que da fruto a mi futuro. Ya déjame avanzar, tú
descansa en paz…
Escrito: 04 de junio del 2023
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